Nuestra
participación en la última edición de la revista especializada en la
observación lunar más prestigiosa a nivel mundial: “The Lunar Observer” del mes
de abril fue reducida, debida al clima y las persistentes nubes de finales del
verano austral. Sin embargo, dijimos presente un mes más, 21 meses seguidos de
participación en la revista.
En
la sección “Lunar Topographical Studies” se mencionan las siguientes
observaciones (pág.8):
ALBERTO ANUNZIATO—PARANÁ,,
ARGENTINA. Drawings of Bessel, Curtius & Sulpicius Gallus.
MAURICE COLLINS - PALMERSTON NORTH, NEW ZEALAND. Digital images of 6 day
moon, Aristoteles, Descartes, Maurolycus & Montes Caucasus.
JOHN DUCHEK – St. LOUIS, MISSOURI, USA. Digital images of Posidonius,
Rupes Altai &
Theophillus-Catharina.
HOWARD ESKILDSEN - OCALA,
FLORIDA, USA. Digital images of waxing crescent moon(2).
RICHARD HILL – TUCSON, ARIZONA, USA. Digital images of Hainzel, Humboldt
& Jannsen.
JERRY HUBBELL – LOCUST GROVE, VIRGINIA, USA. Digital images of full
& 3rd quarter moon..
MICHAEL SWEETMAN – TUCSON,
ARIZONA USA. Digital images of full moon & Gassendi-Mare Humorum.
DAVID TESKE - STARKVILLE, MISSISSIPPI, USA. Drawing of Neper.
STEVE
TZIKAS - RESTON, VIRGINIA, USA. Drawing of 1st quarter moon..
Y
se publicó el texto sobre “Curtius” que acompañaba nuestro dibujo, traducción e
imagen pueden encontrarse en la entrada anterior.
En
la Sección
“Lunar Geological Change Detection Program” (pág.15) se utiliza una observación
visual nuestra de Mons Pico para analizar dos reportes histórico de FLT de 1844
y 2009.
Pero
es el extenso trabajo que el Director del Programa de Detección de Cambios
geológicos lunares le dedicó en las páginas 16 a 19 a un evento de 1995 en
Tycho el que motiva las siguientes reflexiones. Anthony Cook rastrea en la base
de datos del Programa 12 imágenes (9 fotografías y 3 dibujos) de Tycho en las
mismas condiciones de iluminación del evento histórico, para comprobar si lo
que se observó (las sombras eran más grisáceas que negras en el cráter) era
normal en esa fase de la lunación. Entre esas doce imágenes hay una nuestra del
20 de diciembre de 2015.
Nos
pareció interesante subrayar esa imagen como el paradigma de la observación
amateur: obtener una imagen que cumpla con los estándares científicos (datación
precisa, reporte de todas las condiciones de observación, realización
determinada por una necesidad observacional) que es reportada a una
organización mayor que mantiene una base de datos y que permite el acceso a
cualquiera que necesite de ella en cualquier momento. En el caso del Programa
de Verificación de Reportes Históricos de FLT, la utilidad es comparar la
apariencia normal de la superficie lunar con el pretendido evento
extraordinario, sabiendo que la Luna cambia su aspecto de acuerdo a la fase de
la lunación, la libración e incluso el lugar de la Tierra desde la que se
observa. Y cuando se verifica un nuevo Fenómeno Lunar Transitorio, quizás una
de esas imágenes coincida con dicha observación.
La
llegada de las cámaras CCD y luego de las réflex digitales disparó las
posibilidades de los astrónomos amateur, pero tuvo un daño colateral: hirió de
gravedad la observación visual. Es sabido que un observador visual puede
captar, de acuerdo a las circunstancias, más detalles que muchas imágenes
digitales. La observación visual requiere, además, un grado alto de
conocimiento del objetivo observado. La astrofotografía prescinde de ese
conocimiento. Lamentablemente muchos astrofotógrafos no registran los datos de
su observación y la hermosura de la imagen nos hace olvidar todos los datos
científicos que se pueden extraer de ella.
Hay
otro sesgo observacional: a medida que más conocemos sobre el espacio exterior
más tendemos a despreciar la observación lunar y planetaria bajo dos premisas
falsas: ya conocemos todo sobre el sistema solar y el observador amateur no
puede competir con los datos de las sondas espaciales. Entonces al amateur sólo
le quedaría obtener una bonita fotografía para el disfrute de las redes
sociales. Sin embargo, la Luna, Marte, Júpiter y Saturno son mundos en cambio,
cambios que las sondas sólo captan parcialmente. Nuestras observaciones captan
un momento único de la superficie planetaria y son sumamente necesarias. Muchos
son los programas de observación amateur que nutren los papers científicos. Ya
hemos hablado de los lunares muchas veces. Marte es monitoreado desde la
International Society of Mars Observers (ISMO), Júpiter desde el proyecto
JUPOS, ALPO tienen una sección para cada planeta del sistema solar, etc.
Afortunadamente
los astrofotógrafos de nuestra asociación están siempre dispuestos a colaborar
con la investigación científica y sus habilidades artísticas pueden tener un
premio extra.
Recordemos,
imagen sin reporte con datos a una base de datos, no es más que un poster.